El modelo de negocio se basa en lograr un considerable aumento del valor de la tierra sin la necesidad de vender el terreno completo. Esto se consigue mediante el desarrollo meticuloso de un proyecto de subdivisión predial, bien concebido y bien vendido.

Sólo una mínima porción del terreno formará parte del proyecto arquitectónico, mientras que el resto del terreno se convertirá en un gran jardín botánico. Identificaremos “zonas de interés común” como miradores, bosques, cascadas y ciclovías que serán parte del patrimonio colectivo de Bosque el Azul para el uso de los propietarios y qué potenciaran el desarrollo de nuevas etapas del proyecto. De esta manera más que sólo vender un terreno, o una cierta cantidad de m2, vendemos un lugar inmerso dentro de un proyecto urbanístico pensado en el bienestar de sus habitantes y en perfecto equilibrio con la naturaleza existente en la zona, lo que agrega una enorme plusvalía que se incrementa en el tiempo.

Este cuidadoso diseño orgánico, considera la morfología propia del lugar. Su génesis está basada en los accidentes geográficos existentes como quebradas, arroyos y diferencias de cotas o desniveles importantes. Dispone senderos, caminos, ciclovías, miradores y espacios comunes de encuentro, que lo convierten en un espacio con identidad propia y con un relato profundamente vinculado a la idea de habitar conservando. Este cambio de modelo se basa en una narrativa que busca convocar a un otro tipo de cliente, amante de la naturaleza, empático a la idea de conservación y del cuidado del medio ambiente y que valora que su inversión se desarrolle en un entorno que, por su diseño y reglamento de copropiedad incorporado, garantizará que su visión de vida se verá resguardada. Este sello de identidad, coherente al diseño plasmado, produce una revalorización del terreno, lo que permite obtener mayores ganancias usando una extensión considerable menor del terreno original disponible.

En el caso particular de “Bosque el Azul” hablamos de un terreno de 145 hectáreas que originalmente pretendía ser vendido en su totalidad por un valor de 7.5 millones la hectárea, aproximadamente 1000 millones de pesos. Bajo nuestro modelo proponemos el diseño del proyecto utilizando un máximo de 12% del terreno disponible (17,4 hectáreas) para generar unos 27 lotes, de 5000 mts2, (de los cuales 7 irán destinados a cubrir los costos del proyecto), con los 20 disponibles a la venta podremos superar el objetivo económico previsto originalmente por el cliente de 1000 millones de pesos, logrando un total de ventas aproximadas de 1200 millones de pesos. Por otra parte, el diseño original del loteo contempla dos grandes lotes que no estarán a la venta y de los que el dueño podrá disponer para el desarrollo de futuros emprendimientos económicos.

En resumen proponemos un modelo que incrementa la ganancia a la vez que usa sólo una fracción del terreno originalmente disponible. Nuestro modelo se basa en el trabajo integrado de profesionales de la arquitectura, las comunicaciones, el diseño, las finanzas y el marketing digital.